No es fácil tomar una decisión. Por este motivo, conviene tener en cuenta muchos factores que nos ayudarán a acertar. Sin duda, estamos ante una situación en la que las preguntas y la desconfianza nos invaden. Pero te vamos a proporcionar una pequeña guía.
Uno de los primeros puntos en el que debemos detenernos es el relativo a nuestra capacidad económica. Debemos contar no solo con unos buenos ahorros (cercanos al 20% del valor de la vivienda que pretendemos adquirir), además de una fuente de ingresos recurrente como una nómina o una pensión para atender las cuotas mensuales de la hipoteca.
Es muy probable que el banco deniegue tu solicitud si las cuotas de la hipoteca, sumadas a las de tus otras deudas, superan el 35% de tus ingresos mensuales netos.
La nueva Ley de Vivienda ha previsto ciertas facilidades para los menores de 35 años y familias numerosas. Pero es cierto que su entrada en vigor ha quedado un poco en el aire con la declaración de nuevas elecciones previstas para julio. No obstante, vamos a hablar de ellas.
Los jóvenes menores de 35 años con unos ingresos inferiores a 3 veces el IPREM (cerca de 24.000 euros al año) pueden beneficiarse de una ayuda máxima de 10.800 euros.
Las familias numerosas pueden ahorrarse parte del Impuesto de Transmisiones Particulares (ITP) a la hora de comprar una casa de segunda mano.
También has de tener en cuenta tu estabilidad laboral y planes de futuro, pues es posible que no tengas intenciones de permanecer demasiado tiempo en esa ciudad y albergues, en definitiva, intenciones de marcharte a medio plazo porque tienes un trabajo en el que es frecuente la movilidad geográfica. En ese caso, no parece adecuado que te plantees la compra de una casa y convendría que te decantaras por el alquiler dada la libertad que te otorga.
Actualmente el precio de la vivienda está desacelerando su crecimiento. De hecho, según los datos estadísticos de Tinsa IMIE Mercados Locales, la variación media durante el primer trimestre de 2023 ha sido un 0,9% mayor con respecto al trimestre anterior, pero se ha quedado en un 6,3% en términos interanuales.
Por supuesto, la mayor o menor cantidad de dinero que nos veamos obligados a desembolsar también dependerá de la ciudad en la que pretendamos comprar una casa. En 2023 la ciudad más cara para dar el salto a la propiedad es San Sebastián, con un precio de 4.212 euros por metro cuadrado. Muy cerca encontramos a las ciudades de Barcelona, con 3.579 euros, y Madrid, con 3.576 euros.
Si los precios de los alquileres están por las nubes y te encuentras en una buena disposición económica, quizás debieras plantearte adquirir una propiedad.
Es importante que tengas presente lo siguiente antes de comprar:
Por supuesto, únicamente debemos comprar si encontramos una casa que se ajuste a lo que necesitas y a tu presupuesto. No actúes con precipitación.
Esta opción es la más recomendable cuando el mercado del alquiler ofrece precios ventajosos y no te parece adecuado atarte a una hipoteca porque tu situación laboral es inestable. Vivir de alquiler o comprar muchas veces depende de algo tan sencillo como una oferta de vivienda adecuada en la que podamos encontrar el inmueble perfecto para convertirlo en nuestro hogar.
En suma, ten en cuenta estos factores:
También es muy posible que ninguna de las viviendas que has visitado con el propósito de comprarla te convenza del todo y, por este motivo, prefieres el alquiler.
Según los datos del INE, los precios del mercado tienden a ir de más a menos. Al respecto, Fernando Tisner, de la agencia inmobiliaria Casavo, asegura que en 2023 se espera que los precios de la vivienda se normalicen y que cada vez crezcan menos. De hecho, se prevé que descienda en algunos barrios y ciudades.
Pero es cierto que los tipos de interés de las hipotecas han crecido en los últimos meses como consecuencia de la inflación y esto ha desanimado a muchos a solicitar una hipoteca para la compra de una casa.
En la compra de una casa de obra nueva tendremos que pagar el IVA, mientras que en una de segunda mano abonaremos el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP). En ambos casos será preciso costear los gastos de notaría y actos jurídicos documentados.
¿Cómo se calcula la rentabilidad de un alquiler?
La rentabilidad de un alquiler varía de una ciudad a otra, pues entran en juego multitud de factores como explicamos en este artículo sobre cómo calcular la rentabilidad del alquiler.
¿Cómo es un contrato de alquiler con opción a compra?
En el alquiler con opción a compra es necesario firmar un contrato doble o mixto, que incluye un subcontrato de alquiler y otro de compraventa. En este caso, el inquilino tiene la oportunidad de habitar la propiedad durante un período de tiempo específico y, al finalizar ese plazo, adquiere el derecho de compra, pudiendo descontar total o parcialmente las cuotas de alquiler pagadas previamente.
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