Es evidente que a priori comprar parece la opción por la que prácticamente todo el mundo se decantaría, ya que al hacerlo nos convertimos en propietarios de un inmueble que en el futuro podríamos vender si así quisiéramos.
No obstante, no resulta fácil comprar una casa dado que necesitamos un presupuesto inicial de al menos el 20 o el 30% del precio de la vivienda, pues las entidades financieras no suelen conceder préstamos que superen el 80% del valor de inmueble. Por todo ello, las nuevas ayudas para jóvenes pueden resultar decisivas.
Desde el Gobierno se han previsto diversas ayudas para que quienes desean comprar una vivienda cuenten con las máximas facilidades para ello. Así, la reciente Ley de Vivienda que acaba de entrar en vigor contempla incentivar la adquisición de casas para los menores de 35 años y familias numerosas a las que se concederá una financiación de hasta el 30%.
En cualquier caso, tampoco hay que perder de vista las ayudas que se conceden desde las diferentes comunidades autónomas a su ciudadanía siempre que cumplan un conjunto de requisitos.
En primer lugar tenemos que establecer diferencias entre la unidad familiar y la unidad de convivencia que son conceptos diferentes. El primero alude a las personas que forman parte de una familia, mientras que la unidad de convivencia está compuesta por personas que pueden no ser miembros de un mismo núcleo familiar. Únicamente es necesario que habiten el mismo domicilio y compartan espacio.
Es fundamental tener en cuenta los ingresos de tu hogar, los cuales engloban la suma de los ingresos de todas las personas que residen en tu misma vivienda. Para llevar a cabo este cálculo, es necesario sumar la base imponible del ahorro y la base imponible general de las declaraciones de impuestos de cada individuo que forme parte de tu unidad de convivencia. En caso de realizar una declaración conjunta, se deben considerar los ingresos combinados.
Existen determinadas hipotecas concebidas especialmente para las personas que se integran en el grupo Social de la ONCE o empleados de Ilunion, unos trabajos que requieren condiciones específicas para su desempeño. Por este motivo, entidades como el BBVA han desarrollado una serie de productos, como préstamos e hipotecas, con descuentos y ventajas adaptados para estos perfiles.
Como decíamos al inicio, las personas más jóvenes también cuentan con sus ayudas, pues se pretende incentivar la independización de este sector que en muchos casos se ve abocado a continuar viviendo con sus padres:
No obstante, es preciso reunir una serie de condiciones para que esto sea posible. Las vemos:
El subsidio máximo proporcionará cobertura para el 20% del gasto de adquisición de la vivienda, con un límite máximo de reembolso de 10.800 €.
Algunas comunidades contemplan ayudas para la adquisición de hipotecas por un importe superior al 80% y hasta el 95% del valor del inmueble en el caso de personas que no superen los 35 años.
No hay que pasar por alto el hecho de que la mayoría de comunidades autónomas cuentan con ayudas para este sector de la población que necesita un mayor apoyo económico. Vamos a verlas rápidamente:
Prácticamente los requisitos son calcados, pero se añaden condiciones como poseer residencia legal en la Comunidad de Madrid durante los dos años anteriores.
Esta comunidad exige que la vivienda tenga un precio inferior a 295.000 euros o 354.000 euros si son de calificación energética A o B. También es necesario disponer de ahorros para poder pagar el 5% del precio de la casa a los que se añaden los gastos e impuestos asociados; es decir, el 10%.
Además, los menores de 35 años pueden beneficiarse de un tipo de gravamen reducido del 3,5% en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP) y del 0,3% en el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD) al adquirir una vivienda que será su residencia principal, siempre y cuando el valor de la propiedad no supere los 150.000 euros.
En esta región se reduce el pago de impuestos para los menores de 36 años, en el caso de tratarse de una casa nueva, un impuesto de actos jurídicos documentados (IAJD) reducido del 0,5%.
Por su parte, si es una vivienda de segunda mano, un ITP reducido del 5%.
Al igual que en el caso anterior, si es una casa nueva, hablamos de un IAJD reducido del 0,5%. Si se tratara de una vivienda de segunda mano, un ITP reducido del 4%.
En esta región nos ceñimos a los menores de 33 años que compren vivienda de segunda mano que pagarán un ITP reducido del 5%, en vez del general del 10 %.
Los jóvenes menores de 35 años podrán acceder a ayudas de hasta 10.800€, siempre y cuando esta cantidad no supere el 20% del precio de la vivienda. Será necesario que los demandantes acrediten que las rentas anuales de todos los miembros de la unidad de convivencia son iguales o inferiores a 3 veces el IPREM. Además, también disfrutarán de la bonificación de impuestos, reduciendo los mismos a un 0,5% el IAJD o 3% el ITP.
En esta región los menores de 35 años pueden recibir un aval del 20% del precio de la vivienda para facilitar el acceso a la financiación. Se establece que el inmueble no puede superar los 175.000 euros y no se pueden obtener rentas superiores a 5m4 veces el IPREM.
Se establece que los jóvenes menores de 35 años que compren vivienda de segunda mano en la Comunidad Valenciana paguen un ITP reducido del 8% si su declaración de la renta es inferior a 30.000 euros en tributación individual y 47.000€ en conjunta.
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